Mu güenas güenos días a tos que escuchan hoy esta radio,
a mis querios “pandorianos”
les viá dedicar este bando.
Como perraneo que soy,
puisque El CORCHO es muncho Corcho,
y allevo la honra ganá
pa ricitar en panocho,
les quieo espetar este escrito
d’espacio y con güena letra
y’esplicarme bien clarico
pa que to er mundo lo entienda.
Y’es que ayer encomencipiaron
tuicas las porcesiones,
las solemnes caminatas,
penitencias y pasiones.
Y ya se ejan sonar
las cornetas y los tambores.
(y como hay que aprovechar
tuicas las situaciones,
dende aquí felicitar
a Lolas, Lolis y Dolores)
Las canciones de las bandas
en mi mente se retratan
entremetias en mis aentros,
m’allegan al fondo el alma.
Y no es que sea mu devoto,
sino por que las ensayan
¡to los días dende hace meses
en la puerta e mi casa!
Qué belleza, qué hermosura,
qué deleite… ¡Qué trajín!
¡Que estoy de pitos y flautas
hasta ande no pueo icir!
Mañana, Domingo de palmas,
tuico er mundo va a cilebrar
que el Señor, montao en su furra,
a allegao a la zudiá.
Hay que ver, ¡Santa Pacencia!,
la que tuvo JESUCRISTO
pa aguantar tanto tormento
y no icirles ni “pío”;
ni a Pilatos y sus romanos,
ni tampoco a su descipulo;
c’hay que ver si la hizo negra,
Judas, al haberlo vendio.
Igo yo en mi ignorancia,
que algún año s’artará
y les dirá Jesucristo
con esa voz tan templá
cuando llamen a su puerta
y lo quieren apresar:
“¡Este año ya no sargo
puisque me quereis pegar!
Y endemás, como hay crisis
y la cosa histá mu mal,
me queo metio en mi cobacha
puisque no quieo gastar”,
Menos mal que a otro DOMINGO
sa remata la faena,
le bailan tuicos los santos
y le hacen mil zalameras,
puisque er Señor güerve sano
dimpues de tanta tormenta.
Y repican las campanas
y suertan palomas folando,
las bandas a paso ligero
tuicos lo van cilebrando.
Y antoces allega lo güeno
dimpues de tanta llantera
se apreparan toas las Peñas
de to roal e la güerta,
se trerminan penitencias
y tuico este tiempo de pena,
pa dar asín encomencipio
a las FIESTAS E PRIMAVERA.
Que s’aguerden tos los santos,
caa uno en su cobacha
y se queen acobijaos
bien tapaos con una sábana.
Las túnicas bien lavás,
planchás y doblás en el armario
Los cirios y los capuruchos
paraicos, no tumbarlos,
y asín el año que viene
no tendreis que enderezarlos.
Se sancan los zaragüeles,
los refajos, las esparteñas,
los mantones, los alfireles,
se arrecogen clavellinas,
las postizas, las guitaras,
panderetas, las toquillas…
El aroma de la güerta
se respirará tos estos dias,
puisque er Bando e la Güerta lo tenemos ensegüia,
er desfiles de carrozas y
el entierro e la Sardina, que arremata toas estas fiestas
tan bonicas y tan sencillas…
No quieo hacerme cansao,
encomienzo a arrematar,
que aluego ice mi maere
que me busta muncho hablar.
Tremino con mi palique
saluando al personal.
A tuicos lo “pandorianos”
les hago mención especial.
Y al prúbico en general
tan solo ista riceta:
Aprovechar estor dias
y cudiao con la chupeta.
Dempues der día del Bando
echarse un rato la siesta,
que tenemos munchor dias
con los bailes e la güerta,
y’er sábado p’al Entierro
gastar la juerzas que quean.
Pandorianos, me despio.
Mu güena Semana Santa
y Fiestas e Primavera
Pero, como soy blanqueño,
y quieo hacer que se note:
¡Viva la Virgen de la Fuensanta! ¡y tamien VIVA SAN ROQUE!, ¡Pijo!
He dicho.
